A pesar de haber transcurrido más de cuatro meses desde la modificación introducida en el régimen jubilatorio, pasando a la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSe) los fondos que se encontraban en el sistema de jubilación privada tras la eliminación del mismo, aún no se encuentran funcionando los mecanismos establecidos para controlar el uso dado por el Gobierno a tales fondos. La Comisión Bicameral no se encuentra funcionando, lo cual se debe a que la Cámara de Diputados todavía no nombró a los seis miembros pertenecientes a dicha cámara que deben integrar el organismo de control, cuya principal función radica en supervisar el destino de los fondos de la ANSeS. Por otro lado, tampoco se encuentra operativo el Consejo del Fondo de Garantía de Sustentabilidad del Sistema Integrado Previsional Argentino, el cual debería conformarse con funcionarios de la ANSeS, de las entidades empresariales y sindicales, de la Jefatura de Gabinete, y un representante de cada una de las Cámaras del Congreso. Dicho Consejo cuya responsabilidad consiste en controlar los recursos del sistema, aún no se encuentra conformado. Si bien se encuentran designados los representantes de la Unión Industrial Argentina y de la CGT, tanto organizaciones empresarias como sindicales restan nombrar sus representantes, los cuales deberán ser ratificados por el Ejecutivo. Luego de la eliminación de las AFJP, pasaron a disposición de la ANSeS  fondos por 90 mil millones de pesos, con un flujo mensual de 1.100 millones de pesos. Entre las medidas que deberían haber sido controladas por los mencionados mecanismos institucionales de control, se encuentran las continuas compras de bonos de deuda pública por parte de la ANSeS, lo que provocó que se convierta en el principal acreedor del Tesoro entre los entes estatales.