La crisis financiera que está azotando al mundo ha despertado la preocupación de varias organismos y organizaciones, entre ellas la UE, que ahora se propone regular el mercado de los bonos de los ejecutivos y la ceración de entidades capaces de regular el mercado y evitar que se repitan sucesos como los de este año que provocan grandes pérdidas y hacen tambalear las economías de los países. Esas intenciones se dieron a conocer en un documento en el que se expresa la preocupación general de que las crisis bancarias repercutan en toda la estructura económica de un país. EL problema central es cómo una entidad financiera o bancaria crece de tal modo que su quiebra tiene un efecto tan fuerte en la economía mundial. El documento deja entrever que deben arbitrarse medios para salvar a los bancos y permitir que sigan operando aún con problemas, hasta tanto se reorganicen o reciban liquides. Cualquier entidad debería poder quebrar sin por eso producir un cimbronazo de tamaña magnitud. También se está trabajando en regular el mercado de instrumentos derivados que influyen de varias maneras en la economía. Este tipo de instrumentos pueden convertirse en un grave riesgo para la economía, es por ello que se presentarán propuestas de regulación el ano próximo, como por ejemplo la creación de cámaras de compensación centralizadas o implementación de controles más estrictos. Con respecto a las operaciones que se realizarían por fuera de las cámaras centralizadas, la opción es que se aumente la garantía colateral y se dote a esos negocios de más transparencia.