El proceso de prueba respecto del Club Atlético River Plate, su presidente Daniel Alberto Passarella y otros siete integrantes de la Comisión Directiva, que correspondía a la falta de recaudos de organización y seguridad exigidos por ley fue suspendido.
 
Así lo decidió María Alejandra Doti, titular del juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas Nº 24 de la Ciudad de Buenos Aires en la causa iniciada en 2011 con motivo de los incidentes en el partido contra Belgrano de Córdoba.
 
En tal sentido, el acuerdo con el Ministerio Público Fiscal fue homologado y los acusados y la institución tendrán la obligación de entregar insumos a entidades benéficas por la suma de 200.000 pesos.
 
Por su parte, Passarella deberá realizar el otorgamiento por un monto que equivale a los 60.000 pesos mientras que cada uno del resto de los dirigentes acusados tendrán que hacerlo por 30.000 pesos cada uno.
 
Además, el club deberá llevar a cabo las modificaciones estructurales en el estadio, brindar información al Cuerpo de Investigaciones Judiciales sobre personas que ingresen a los encuentros y participar de un programa piloto impulsado por el Ministerio Público Fiscal para determinar la operativa correspondiente en materia de seguridad tanto en espectáculos deportivos como otros masivos.
 
Cabe señalar que la situación del Jefe de Seguridad del Club no fue resuelta debido a que, a diferencia del resto de los imputados, acordó con el fiscal realizar un juicio abreviado.