El 30 de octubre de 2020 el Banco Central de la República Argentina (BCRA) emitió la Comunicación “A” 7153 a través de la cual estableció nuevas disposiciones en relación con el Sistema Nacional de Pagos a través de la creación e implementación del programa de “Transferencias 3.0”.
El objetivo del programa es impulsar una plataforma de pagos digitales más accesible e inclusiva. En tal sentido, una de sus principales ventajas reside en el hecho de que las transferencias inmediatas serán más accesibles, eficientes y seguras.
Asimismo, el ecosistema de pagos digitales que se establezca por medio del Programa será abierto, con acceso universal a cuentas bancarias y proveedores de servicios de pago, y con sistemas integrados que facilitarán el uso.
En particular, el Programa tendrá las siguientes ventajas:
(i) Interoperabilidad: se crea la Interfaz Estandarizada de Pagos (IEP) con una arquitectura abierta que permitirá interoperar a todas las cuentas (bancarias y de billeteras virtuales). Esto significa que un mismo código QR permitirá hacer pagos con transferencias desde cualquier cuenta, ya sea de un banco o de un proveedor de servicios de pago.
(ii) Inmediatez: los comercios recibirán la acreditación en forma automática y con carácter irrevocable.
(iii) Economía: el Programa tiene un tope de comisión de 8 por mil que pagan los comercios y les permite eliminar los gastos ocultos que implica el manejo de efectivo. Entre ellos, el transporte y el almacenamiento.
(iv) Competitividad: el Programa favorece la competencia para proveer el servicio a comercios minoristas y barriales que tendrán comisiones bonificadas o de bajo costo. Los comercios considerados como MiPyMEs que adhieran al sistema no tendrán comisiones durante los tres primeros meses de uso del servicio por los primeros 50.000 pesos que facturen cada mes, y posteriormente tendrán un tope de comisión de 8 por mil.
(v) Flexibilidad: el Programa permitirá operar con tarjetas, códigos QR, cuentas DNI, solicitudes de pago, biometría (por ejemplo, huella digital), entre otros.
La norma entrará en vigencia de forma progresiva a partir del 7 de diciembre del corriente. En una primera etapa se armonizará la regulación sobre transferencias electrónicas de fondos, admitiendo cualquier caso de uso (persona a persona, persona a empresa, empresa a empresa, etc.) y generando las condiciones de competencia entre operadores.
En una segunda etapa, se establecerá una mensajería de confirmación y monitoreo de las garantías, a través del estándar ISO 20022.
Por Agustín Cerolini y Julieta Mel
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