El trámite de designación de la totalidad de los actuales miembros del directorio (Mercedes Marcó del Pont, Miguel Pesce y Santiago Carnero) jamás recibió el aval de la Comisión de Acuerdos del Senado.
La normativa exige la condición antes mencionada para completar los nombramientos, los cuales se equipararían a los de los jueces. De esta manera, la conducción del Banco Central de la República Argentina (BCRA) quedó a tiro de decreto.
Desde el martes a las cero horas, todas las designaciones son “en comisión”. Si el Senado hubiera prestado su respaldo, la posibilidad de remover a las autoridades no sería tan fácil para La Presidente de la Nación.
Cabe destacar que la exigencia de acuerdo parlamentario, el mandato por un plazo que supera en dos años al del presidente que los designa y la existencia de causales específicas de remoción tenían como objetivo brindarle mayor autonomía a la institución.
Ahora, el mandato de los tres únicos directivos nombrados con todos los pasos que determina la ley, Gabriela Ciganotto, Carlos Pérez y Carlos Sánchez, caducó. El directorio del Banco Central quedó integrado por 5 miembros, un mínimo suficiente para sesionar.
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