El Senado Nacional otorgó media sanción a un proyecto de ley mediante el cual se busca modificar la Ley de Procedimientos Administrativos, planteando que el pronunciamiento acerca de los reclamos debe ser respondido dentro de los 90 días de formulado, con lo que se pretende darle mayor celeridad a la contestación de las peticiones.

La iniciativa impulsada por el senador Agustín Pérez Alsina, la que ya pasó a Diputados, establece que “vencido ese plazo el interesado requerirá pronto despacho y si transcurriesen otros 45 días, podrá iniciar la demanda en cualquier momento, sin perjuicio de lo que fuera pertinente en materia de prescripción”.

El proyecto contempla que “el Poder Ejecutivo, a requerimiento del organismo interviniente, por razones de complejidad o emergencia pública, podrá ampliar fundadamente los plazos indicados, se encuentre o no en curso, hasta un máximo de ciento veinte y sesenta días respectivamente”.

De acuerdo a lo estipulado en la iniciativa, la denegatoria expresa del reclamo no podrá ser recurrida en sede administrativa.