Se trata de la empresa agropecuaria de la familia Brito, segunda compañía que sale a cotizar en el mercado de valores de Argentina durante 2010. Colocó $ 52, 5 millones de acciones a un valor de $ 1,83 por acción.
Nicholson y Cano Abogados, uno de los estudios más grandes de Argentina, asesoró a Inversora Juramento, radicada en la provincia de Salta, quien a través de una oferta pública inicial (“IPO”), colocó entre inversores $ 52,5 millones de acciones a un valor de $ 1,83, convirtiéndose en la segunda empresa que sale a cotizar sus acciones en la Bolsa porteña durante el año 2010.
Inversora Juramento cuenta con 67.000 hectáreas de campos en la provincia de Salta –noroeste de Argentina- y desarrolla su negocio principalmente en la industria de la carne, donde participa en las distintas etapas de la cadena de valor: cría e invernada, engorde a corral (feedlot), industrialización, comercialización y venta directa al público, contando con un frigorífico propio como subsidiaria principal.
Nicholson y Cano tuvo a su cargo el asesoramiento legal financiero, corporativo e impositivo del emisor de las acciones. Durante el proceso, que duró más de un año, el Estudio realizó el due diligence legal, elaboró la documentación presentada ante la Bolsa de Comercio y la Comisión Nacional de Valores, asesoró en la adecuación de la Sociedad al régimen de oferta pública, en la colocación y cierre de la transacción y en el cumplimiento del régimen informativo ante los órganos de control, entre otras cosas.
Se destaca, también, el asesoramiento sobre las mejores prácticas de gobierno corporativo que toda sociedad cotizante debe adoptar y el extenso trabajo de due diligence sobre la compañía en cada una de sus áreas más significativas, donde vale mencionar la auditoría sobre los asuntos ambientales, incluyendo la verificación in situ de los campos, el feedlot y las plantas procesadoras de alimentos.
Por el estudio Nicholson y Cano, participaron el socio Marcelo Villegas, y los asociados seniors Felipe Hughes y Juan Martín Ferreiro del sector financiero. En los aspectos societarios intervinieron la asociada senior Verónica Sarratea y María Blaquier. La auditoría ambiental fue realizada por el socio Horacio Payá y el asociado Martín Rodríguez. Y en la auditoría de títulos de propiedad participaron el socio Agustín Pérez Cambiasso y el asociado Juan Pablo Morad, del área de Real Estate.
Por el lado de colocadores, intervino el Estudio Bruchou Fernández Madero & Lombardi, asesorados por Hugo Bruzone y Lucrecia von Petery.
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