La Cámara de Diputados de la Nación aprobó por unanimidad el convenio constitutivo del Banco del Sur, cuya finalidad consistirá en promover las obras de infraestructura y el desarrollo económico en los países miembros de la región.

El proyecto de ley contaba con media sanción del Senado al momento de ser aprobado de modo absoluto por los diputados, quienes ofrecieron 210 votos a favor y seis abstenciones. El objetivo de la moción es el desarrollo económico y fomento de obras de infraestructura en los países de la región, lo cual se perseguirá mediante las suscripciones de acciones a cargo de los miembros un total de 7000 millones de dólares pagaderos en los próximos cinco a diez años.

En concreto, el plan de acción consiste en que la Argentina, Brasil y Venezuela sean miembros fundadores de peso y suscriban acciones Clase A por 6000 millones de dólares, en una proporción de 2000 millones cada uno, los cuales deberán ser aportados a lo largo de cinco años, con un equivalente a 400 millones de dólares por año. Por otro lado, Ecuador y Uruguay, suscribirán acciones en una proporción menor, de 400 millones de dólares, y Bolivia y Paraguay, a razón de 100 millones cada uno, que gozarán del beneficio de integrar el capital en un plazo mayor, de diez años.

En relación a lo anterior, se han estipulado distintas capacidades de préstamos para los distintos miembros con el fin de que puedan llevar a cabo sus obras. De este  modo, Argentina, Brasil y Venezuela podrán solicitar créditos por hasta 4 veces su aporte de capital, mientras que los países chicos  podrán solicitar hasta 10 veces su aporte de capital en créditos, en tanto que el límite de préstamos total del Banco del Sur a los países será de tres veces su patrimonio neto.

Cabe remarcar que la iniciativa gozó de diversos comentarios favorables por parte de todos los bloques parlamentarios. En tal sentido, el diputado Carlos Heller consideró al proyecto como un "hecho excepcional producto del nuevo estilo de integración que se está gestando en la región", y agregó que " refleja los cambios que se están dando al interior nuestros países", y a su vez se podrían "fortalecer conceptos de soberanía política y económica y recrea escenarios de mayor participación".

En el mismo sentido, el Presidente de la Comisión de Finanzas, Alfonso Prat-Gay, respaldó la propuesta y dijo que se trata de "un instrumento adecuado para obras de infraestructura y desarrollo". Por su parte, Federico Pinedo remarcó su aceptación comentando “vamos a ganar prestigio y liderazgo político en la unificación de la integración sudamericana".