En el marco de la en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Uruguay comienza a ceder ante la presión de Argentina para que brinde información tributaria respecto de sus contribuyentes argentinos.

Desde Montevideo, las fuentes oficiales del gobierno indicaron un ánimo de entablar un proceso gradual y prudente que colabore con la Argentina al mismo tiempo que resguarde la confianza de los inversores argentinos en Uruguay.

Los datos que el país vecino le suministraría a nuestra Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) se daría en arreglo a los estándares internacionales de intercambio de información tributaria de la OCDE, en cuya sede central de París se realizó recientemente la reunión donde se plantearon cuestionamientos sobre el régimen de acciones al portador y la resistencia uruguaya de intercambiar datos fiscales con Argentina.

Actualmente, la República Oriental se halla en una “lista gris” de la OCDE, que está integrada por países adherentes que asumieron compromisos pero que todavía no los hicieron operativos. Resulta que si bien el país ha entablado tratados de intercambios con otros doce países, resulta indispensable que pueda concretar acuerdos con contrapartes relevantes, como lo es la Argentina.

En consecuencia, según dispone la OCDE, Uruguay deberá modificar su régimen vigente de acciones al portador para mejorar en el requisito de disponibilidad de información, el cual debe verse satisfecho a fin de salir de la “lista gris”.

A pesar de las críticas recibidas para la misión del país en París, Uruguay ha acreditado poseer un adecuado acceso a la información impositiva, ya que cuenta con registros impositivos confiables y accesibles de cada contribuyente.

Al respecto, la Asesoría Tributaria de Economía uruguaya remarca su interés en demostrar voluntad de transparencia mientras se protege a los inversores extranjeros, a fin de que no se vea como un paraguas para evasores impositivos.