Con el fin de reivindicar la igualdad y la no discriminación de la mujer, fue presentado en la Legislatura porteña un proyecto de ley que pretende que aquellos hijos nacidos en el ámbito de la Capital Federal, deban ser inscriptos de manera obligatoria en el Registro Civil con los apellidos de ambos padres.

La iniciativa contempla como excepción a la utilización de ambos apellidos, aquellos casos en los que el hijo sea sólo reconocido por uno de los progenitores, circunstancia en la que se le podrá adjudicar el apellido compuesto de uno de los progenitores, mientras que si posee apellido simple, se podrá elegir otro apellido de alguno de los ascendientes que figuren en el acta de nacimiento.

Según estipula el proyecto, en caso de que el padre restante fuese conocido con posterioridad, el segundo apellido podrá ser reemplazado por el que corresponda.

De acuerdo a lo publicado por el diario La Nación en su edición de hoy, el proyecto fue elaborado por el legislador Marin Hourest, siendo firmado por legisladores de todas las bancadas.

Según fue publicado en el mencionado matutino, el autor de la iniciativa sostuvo que "la utilización de ambos apellidos representa un avance en resguardo del derecho a la identidad de los menores, consagrado en la Convención Internacional de los Derechos del Niño, Niña y Adolescente, al agregar un elemento más para asegurar la determinación filial".