El Parlamento francés, reunido en Congreso, el cual se encontraba compuesto por diputados y senadores, logró aprobar las modificaciones constitucionales que fueron impulsadas por el presidente, Nicolás Sarkozy. Mediante la reñida votación, en la cual se impuso el sí, por un solo voto más a favor del partido oficialista, se lograron introducir importantes modificaciones, las cuales se venían buscando desde hacía bastante tiempo. A raíz de la victoria obtenida, el presidente francés, obtenía una nueva victoria en la puesta en marcha de su proyecto de reformas. A partir de ahora, podrá dirigirse a los diputados en el Congreso, facultad que hasta el momento se encontraba vedada. Mediante la modificación, se establece un máximo de dos mandatos consecutivos. Además, se le otorgan nuevos poderes al Congreso, mediante los cuales puede gestionar parte de su agenda, facultad que anteriormente se encontraba en manos de Ejecutivo. Entre otras de las importantes modificaciones que introduce el proyecto recientemente aprobado, se destaca el establecimiento de un estatuto de la oposición, a la vez que se introduce la mención a las lenguas regionales como patrimonio de la nación.