Mediante la resolución 140/2012, la Unidad de Información Financiera (UIF) implementó nuevos controles a los fideicomisos para evitar maniobras de lavado de dinero y financiamiento del terrorismo.

En tal sentido, los administradores de los fideicomisos tendrán la obligación de elaborar un manual con los mecanismos y procedimientos para la prevención de los delitos mencionados anteriormente.

Además, deberán designar a un oficial de cumplimiento, implementar auditorias periódicas y llevar a cabo un programa de capacitación del personal para instruirlos acerca de las nuevas reglamentaciones y las posibles operaciones sospechosas.

Por otra parte y a partir de la nueva resolución publicada en el Boletín Oficial, los administradores se deben comprometer a implementar medidas que permitan a los sujetos obligados reforzar de forma electrónica las operaciones que realizan sus clientes.

En tal sentido, se tendrán que poner a disposición herramientas tecnológicas que otorguen la posibilidad de analizar o monitorear distintas variables con el objetivo de identificar ciertos comportamientos y visualizar posibles operaciones sospechosas.