El pasado 27 de abril se aprobó el Plan Provincial de Respuesta al Cambio Climático (2022-2030) de la Provincia de Río Negro en el marco de lo establecido en el art. 20 de la Ley N°27.520 (Ley de presupuesto de mínimo de adaptación y mitigación al cambio climático global), del art. 20 del Decreto N°1030/20 (reglamentario de la Ley N°27.520) y de la Ley N°5.140 (Ley General de Cambio Climático de la Provincia de Río Negro).

El Plan se elaboró mediante un proceso de construcción de consenso entre las instituciones y otras entidades, acompañando una estrategia de desarrollo resiliente a largo plazo y pensando en el año 2030 como un futuro próximo. Se menciona que la provincia ya se encuentra experimentando impactos causados por el cambio climático, tales como sequías, inundaciones, olas de calor, aumento del nivel del mar, entre otros, y que se realizó una evaluación de riesgos y vulnerabilidades asociadas al cambio climático en la provincia, identificándose cuatro regiones y así determinando las áreas más frágiles y los sectores que podrían verse más afectados.

Estableció que las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de la provincia de Río Negro equivalen, aproximadamente, al 1,56% de las emisiones nacionales equivalentes a 5,71 MtCO2e. Aplicando esta representatividad al objetivo de mitigación de Argentina, se define que la meta para Río Negro corresponde a no exceder la emisión neta de 5,44 MtCO2e.

De este modo, con el fin de alcanzar el objetivo de mitigación planteado, se definieron medidas y políticas públicas a implementar desde los distintos ministerios y secretarías de estado, que apuntan a la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, englobadas en los principales sectores de emisión.

Energía Estacionaria:

– Reglamentar la ley de Generación Distribuida con Energías Renovables.

– Promover el desarrollo de la ley de Ahorro y Eficiencia Energética.

– Disminuir las emisiones fugitivas de gas natural.

– Proveer soluciones de Energías Renovables y Eficiencia Energética adaptadas a disponibilidad de recursos locales.

– Desarrollar el hidrógeno verde.

– Reglamentar lineamientos para las compras públicas sustentables.

– Adoptar el Programa de Uso Racional y Eficiente de la Energía (PROUREE) en edificios públicos.

– Implementar la certificación de Eficiencia Energética en Viviendas.

– Establecer un recambio de luminarias en el alumbrado público.

– Desarrollar el Programa de Instalación de fuentes de Energía Híbrida en Parajes Aislados.

– Apoyar a entidades civiles a través del Programa de Asistencia Técnica a entidades civiles y/u Organismos Públicos Provinciales.

– Asistir técnicamente a los sectores económicos claves de la provincia a través de programas de eficiencia energética para sectores económicos específicos de la Provincia de Río Negro.

– Intervenir en la regulación de habilitaciones profesionales.

– Incorporar la eficiencia energética en la educación formal.

– Desarrollar mecanismos de financiación para el desarrollo e implementación de Proyectos de eficiencia energética y energías renovables.

– Desarrollar campañas de información, concientización y educación.

– Promover el uso de calefones y termotanques de mayor eficiencia en viviendas.

Transporte:

– Promover la movilidad sostenible para el transporte de cargas y pasajeros.

– Promover la movilidad sostenible a partir de proyectos de senderos, paseos peatonales, bicisendas y ciclovías.

– Promover la renovación de la flota vehicular pública.

– Promover la renovación de vehículos particulares livianos.

– Difundir e implementar medidas de ecodriving.

– Promover la eficiencia energética en el transporte marítimo.

– Impulsar Ley de Movilidad Sustentable.

– Promover la instalación de puntos de carga de energía.

– Jerarquizar los servicios ferroviarios de transporte de pasajeros. Aumentar frecuencia y capacidad del Tren Patagónico.

Residuos:

– Promover el aprovechamiento energético de los residuos forestales en zonas urbanas y rurales.

– Impulsar proyectos de economía circular aplicables a los distintos sectores y actividades.

– Fortalecer la gestión adecuada de residuos reciclables.

– Producir energía a partir del biogas generado en rellenos sanitarios y plantas de tratamiento cloacales.

– Erradicar basurales a cielo abierto.

– Fomentar proyectos de tratamientos alternativos de efluentes industriales y de producción agropecuaria.

– Fomentar proyectos de investigación y desarrollo para el reaprovechamiento de los RSU y Residuos Especiales.

– Extender las redes cloacales y construcción de plantas de tratamiento de efluentes.

Agricultura, Silvicultura y Cambio en el uso de suelo:

– Fortalecer el plan de prevención y combate de incendios.

– Promover el crecimiento de especies arbóreas a través del aprovechamiento sostenible de las plantaciones y bosques nativos.

– Elaborar mejoras en el manejo de residuos forestales con aprovechamiento energético y/o para evitar incendios.

– Realizar y/o actualizar los Planes de Manejo de Áreas Naturales Protegidas (ANP).

– Promover la actividad ganadera libre de deforestación, de acuerdo al Plan de Manejo de Bosques con Ganadería Integrada (MBGI).

– Fortalecer prácticas de manejo adaptativo orientadas a la evaluación forrajera y manejo de la hacienda sobre pasturas naturales.

– Generar información con perspectiva climática para el manejo de sistemas de humedales.

– Aplicar prácticas de manejo sostenible de pasturas.

– Promover el manejo en la dieta de los animales.

– Promover estudios para la mejora y el aumento en la productividad de pasturas.

– Contribuir a un desarrollo y integral y sustentable de la ganadería a través del Programa de fomento y desarrollo de la ganadería holística-regenerativa-adaptativa en zonas de secano en la región sur.

– Producir biogas a través del desarrollo de biogestores en feedlots.

Asimismo, la norma determinó como ejes de adaptación: a) respuestas a emergencias climáticas y concientización; b) adaptación agropecuaria y minera; c) acciones sobre la biodiversidad; d) protección y adaptación de infraestructuras. A ellos, les corresponden 50 medidas de adaptación.

Por otro lado, se crearon 96 indicadores de seguimiento correspondientes a las acciones planteadas en la estrategia de adaptación y la de mitigación.

Por Manuel Frávega