Tras considerar que actuaban conjuntamente en representación de los hermanos y de sus supuestas familias biológicas, la jueza Sandra Arroyo Salgado, a cargo del Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional Nº 1 de San Isidro, separó a dos abogados de la causa por los hijos de Ernestina Herrera de Noble. Luego de haber analizado el expediente en su totalidad, la magistrada determinó que “ambas asistencias técnicas han efectuado presentaciones en forma concomitante –con cargo de igual fecha y hora- con idéntico objeto y alcance, que sólo se distinguen por la identidad de los signatarios”. En base a ello y de acuerdo a lo establecido por los artículos 109 y 113 del Código Procesal Penal de la Nación, la jueza decidió separar de la causa a Jorge Eduardo Anzorreguy y Horacio Marcelo Silva. Luego de que le fuera otorgada la competencia por la Cámara de Casación Penal, la jueza agregó en su primera decisión en el presente expediente que “no sólo se aprecia la actuación irregular de Jorge Eduardo Anzorreguy y Horacio Marcelo Silva -de la que diera cuenta la Cámara de Casación- sino también que toda la asistencia letrada de la parte imputada y de quienes se presentan como legítimos interesados habría actuado en forma coordinada e indistinta a la hora de materializar sus presentaciones obrantes en la causa”. Luego de considerar que los profesionales actuaban de manera conjunta en defensa de la imputada y de las presuntas víctimas, la jueza ordenó que se investigue a los abogados apartados de la causa por la posible comisión del delito de prevaricato. Por otro lado, de acuerdo a lo informado por el Centro de Información Judicial, la jueza Sandra Arroyo Salgado intimó a las Abuelas de Plaza de Mayo, quienes son parte querellante en la causa, para que designe a sólo dos de sus cuatro abogados que venían interviniendo en la causa, para que la patrocinen de ahora en adelante.