En el día de ayer, la Cámara de Diputados aprobó por 190 votos a favor, ninguno en contra y 29 abstenciones, el proyecto de ley que establece una nueva regulación al mercado de medicina prepaga que contaba con la aprobación de la Cámara de Senadores.

La iniciativa impulsada por el oficialismo dispone que las prepagas no podrán rechazar el ingreso de nuevos afiliados alegando enfermedades preexistentes, aunque sí aplicar valores diferenciales debidamente justificados y autorizados.

A su vez, la ley dispone que las prepagas no pueden incrementar la cuota a los mayores de 65 años de edad, con diez años de antigüedad en la cobertura, mientras que la edad tampoco podrá ser un criterio de rechazo de admisiones.

Por otro lado, la normativa dispone que el Gobierno deberá imponer mecanismos para autorizar los aumentos de las cuotas, así como también el Ministerio de Salud deberá autorizar los contratos de prestaciones.

Los afiliados podrán rescindir su contrato con la prepaga en cualquier momento, y éstas no podrán incluir períodos de carencia o espera para todas aquellas prestaciones que se encuentren incluidas en el Plan Médico Obligatorio.