El Gobierno español brindó una serie de subsidios a una empresa del grupo Pescanova con el fin de "modernizar las instalaciones de la firma Ultracongelados Antártida, dedicada al procesado de productos de la acuicultura".
Tras la ayuda estatal, la Comisión Europa abrió una investigación para determinar si el accionar se encuadra dentro de las normativas del continente y si existe una compatibilidad con el mercado interno.
De esta manera, Bruselas cuestiona si la ayuda pública que propuso el Gobierno español impulsará a la empresa a invertir en mayor medida de lo que lo hubiera hecho sin el subsidio.
En tal sentido, España y los actores implicados tienen un plazo de dos meses para aportar a la Comisión las aclaraciones pertinentes, según explicaron fuentes comunitarias.
Cabe destacar que este es el primer paso que se lleva a cabo en las investigaciones vinculadas a las ayudas estatales brindadas a grandes empresas. Luego, Bruselas evaluará el caso y decidirá si es correcta la aplicación del subsidio.
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