En la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires avanza un proyecto que busca regular la apertura de autoservicios en el ámbito de la Capital Federal, que entre otras disposiciones, establece que los locales porteños deberán contar con áreas de carga y descarga de mercaderías.

De acuerdo a la iniciativa que el lunes pasado fue aprobada “en primera lectura”, aquellos comercios de más de 100 metros deberán contar con un área específica para la carga y descarga de mercaderías.

Cabe recordar que tras la sanción en “primera lectura”, en un plazo de treinta días debe ser convocada una nueva audiencia donde participarán aquellos interesados, luego de lo cual, el proyecto regresará a la Legislatura para la “segunda lectura”.

Dicha superficie variará de acuerdo a la dimensión del salón de ventas del establecimiento, ya que los comercios que cuenten con un salón de ventas de entre 100 y 300 metros cuadrados, deberán tener un depósito de 30 metros cuadrados, mientras que la normativa establece que tal superficie deberá irse incrementando hasta alcanzar los 90 metros cuadrados para los comercios de más de 600 metros cuadrados de salón de ventas.

A su vez, la normativa contempla que los comercios con más de cien metros cuadrados deberán contar con un área de estacionamiento para clientes.

El proyecto en cuestión no hace referencia a si la normativa regirá sólo para los nuevos comercios o si también alcanzará a los supermercados que ya se encuentran en funcionamiento.

Por otro lado, es importante remarcar, que de acuerdo a la iniciativa elaborada por el legislador Cristian Ritondo, las mencionadas regulaciones rigen para los comercios ubicados sobre la “red vial primaria”, conformada por las autopistas y las avenidas de tránsito rápido, y la “red vial secundaria”, la que se encuentra conformada por las avenidas, ya sean de mano única o doble mano.