El juez Norberto Oyarbide se verá obligado a cerrar la causa por la denuncia del Gobierno contra el ex presidente del Banco Central Martín Redrado, por sus supuestas declaraciones en un reportaje respecto de que “los amigos del poder” que habían comprado dólares durante la crisis del año pasado. Otro fiscal dijo que se debe desestimar la denuncia del Poder Ejecutivo, al tiempo que sumó una nueva alerta contra la judicialización de la política. Oyarbide había apelado al fiscal general ante la Cámara Criminal y Correccional Federal, Germán Moldes, en desacuerdo con el dictamen del fiscal de primera instancia Patricio Evers, que indicaba no seguir la investigación. Sin embargo, Moldes también dictaminó ayer que la Justicia debe desistimar la denuncia del Poder Ejecutivo, y aprovechó para subrayar la inoportunidad de judicializar la política. “El pedido de desestimación que realizó el Sr. agente fiscal (Evers) luce, a mi entender, apropiado y conveniente”, aseguró Moldes. Agregó que “no existe posibilidad de atribuir a Pérez Redrado, o a algún otro funcionario del BCRA, la comisión del delito de omisión de denuncia”, pues se requiere que haya existido un delito previo a denunciar. Fiscales de primera instancia en el fuero Criminal y Correccional Federal habían dejado trascender, tal como adelantó El Cronista, que veían con malos ojos inmiscuirse en disputas de corte político, pero ahora fueron avalados por el fiscal de Cámara, en línea con los último pronunciamientos de ministros de la Corte Suprema de Justicia. “En este proceso, una vez más, advierto la actual e inquietante tendencia de someter a inspección judicial buena parte de la actividad política. Y es turbadora tal situación, porque no se deben ajustar los cánones de atribución de responsabilidad política a aquellos que sustentan la imputación por la comisión de delitos. Así, resulta difícil la convivencia entre conflictos de naturaleza esencialmente política y la gimnasia propia del pleito judicial”, añadió, para concluir que la invitación de Oyarbide le permitió “tratar de poner orden en este episodio”. Siguiendo al fiscal Evers, Moldes pidió distinguir entre “dichos” en el reportaje periodístico a Redrado y “hechos”, que a su jucio, permiten “obturar” el avance de la investigación. “En principio debe desterrarse la idea de que las expresiones de Pérez Redrado pudieren tener fines de intimidación o amenaza. Son, tal vez, mandobles lanzados en medio de un conflicto –de raíz política– en que estaba sumido quien lo dijo”, afirmó Moldes. Por otra parte, señalo que la compra de divisas dentro de los parámetros que marca la ley no constituyen un delito, e incluso la compra fuera de los límites reglamentarios sólo merece sanciones administrativas. Por estos motivos, desestimo el delito de encubrimiento de Redrado o de otro miembro del Directorio del BCRA. Fuente: Cronista.com