La petrolera YPF prorrogó hasta el 26 de diciembre el plazo para negociar la compra de Metrogas con sus accionistas.

Se trata de un nuevo intento de la petrolera por tomar el control de la distribuidora de gas, que actualmente se encuentra en manos de British Gas (BS), la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), el personal y accionistas bursátiles.

El interés de YPF para concretar la compra, se funda en la necesidad de continuar con el funcionamiento de la distribuidora de gas que se encuentra en default, sumado al temor que le genera el supuesto de la declaración judicial de quiebra de Metrogas, que no sería favorable para la reputación de la petrolera.

A pesar de los reiterados intentos de YPF por formalizar la transacción, existen varios escollos que le impiden concretar la operación.

Por un lado, YPF deberá obtener el respaldo de los principales acreedores de Metrogas, como  las empresas Marathon, Fintech, y Dolphin, a fin de salir del default.

Luego, será necesario conseguir el aval estatal ya que se prohíbe por ley que un productor de gas sea a la vez dueño de una distribuidora. Con respecto a este punto, resulta favorable para la concreción del traspaso que existen antecedentes que acreditan que el gobierno no permitirá que empresas de este tipo pasen a manos de inversores extranjeros, y sean operadas por capitales nacionales.

Además, de cumplirse esos requisitos, YPF deberá enfrentar el juicio arbitral que BG le inició a la Argentina ante el Ciadi tras la devaluación, cuyo desenlace permanece incierto.

De todos modos, esta semana las compañías informaron a la Bolsa de Comercio sus intenciones de seguir negociando para procurar concretar la transacción.

En pos de su viabilidad, Metrogas presentó un plan de reestructuración de su pasivo, que asciende a u$s 250 millones, el cual contempla una quita del 55%, para lo cual la Justicia le concedió plazo hasta el 2012.

Cabe remarcar, que si bien la distribuidora de gas se encuentra actualmente intervenida por el Estado con el objeto de garantizar la continuidad de su servicio, de efectuarse la compra, YPF deberá emprender una nueva discusión con la Administración a fin de para lograr readecuar la tarifa, congelada desde 2002.