La Cámara Nacional de Apelaciones en lo Laboral confirmó una resolución de primera instancia en la que se denegaba la pretensión del actor para ser reincorporado a su puesto de trabajo, debido a que la misma había sido iniciada siete meses después de haberse producido el despido. Los jueces que componen la Sala III, confirmaron la resolución de primera instancia que había rechazado la pretensión presentada por el accionante con el fin de ser reincorporado a su puesto de trabajo, tras haber resuelto que el despido del mismo no había configurado un acto discriminatorio. En la causa “Juárez Pablo Jesús c/ Farmacity S.A. s/ juicio sumarísimo”, los camaristas, tuvieron en cuenta que en el momento de las negociaciones que se habían llevado a cabo en el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, el actor había  rechazado la oferta de la demandada para ser reincorporado en condiciones razonablemente aceptables. Luego de ello, vía postal  el actor manifestó que aceptaba dicha oferta, intimando a la empleadora para que en 48 horas le indicara con precisión el momento de su reincorporación. A su vez, en su intimación, el accionante solicitaba el pago de los salarios caídos, considerando el pago de los mismos debido a que su fuerza de trabajo había estado a disposición de la empresa. Los magistrados consideraron que la puesta a disposición efectuada por el actor no era válida, debido a que la misma se había interpuesto con más de siete meses de retraso de producido el despido, lo cual significó una convalidación del distracto. Según los jueces, la alegada voluntad de reincorporarse a su puesto de trabajo, se ve desmentida por el hecho de que percibió la indemnización sin reserva alguna, a la vez que tuvieron en cuenta el tiempo transcurrido entre la cesantía y la promoción de la demanda. En base a tales fundamentos, en la resolución emitida el pasado 28 de mayo del corriente año, los jueces ratificaron los fundamentos expresados en la resolución apelada.