El Senado de Estados Unidos reveló un informe sobre la empresa de tecnología Apple en el que la acusa de haber eludido el pago de 74.000 millones de dólares dentro del país y en el mundo, entre los años 2009 y 2012.

“Apple buscó el cáliz sagrado de la evasión de impuestos”, sostiene el informe y alude a que la empresa habría abierto una red de filiales que no tienen ni empleados ni instalaciones físicas.

El Senado se ocupó de dejar en claro que Apple no violó ninguna ley. Cabe recordar que las compañías multinacionales con sede dentro de Estados Unidos no tienen que abonar tributos en el país por las ganancias en el extranjero.

Lo mencionado anteriormente tiene como condición que el dinero obtenido no vuelva a la nación americana. Por tal motivo, Apple debería rendir cuentas con Hacienda si repatriara los beneficios a su sede central de California.

En tanto, la compañía afirma que no usó ningún tipo de truco fiscal y que lo único que ha hecho es aprovechar la ley norteamericana que exime del pago fiscal si las ganancias se producen en el extranjero.