Informe del Colegio de Abogados de Estados Unidos para Mejorar la Calidad de las Mediaciones
Luego de haber efectuado una investigación durante un plazo de dos años con el fin de determinar los factores que definen una práctica de mediación de calidad, el Colegio de Abogados de Estados Unidos (ABA) presentó un informe de conclusiones. Para llevar a cabo tal investigación, se organizaron varios grupos de trabajo en nueve ciudades de EE.UU y de Canadá, entrevistando tanto a los mediadores como a las partes. Todas las mediaciones analizadas, se caracterizaban por encontrarse la partes representadas por un abogado. De acuerdo a las respuestas brindadas por las partes encuestadas, se resaltaron cuatro aspectos donde la mediación podría ser mejorada. El primero de ellos hace referencia a la preparación de la mediación por parte del mediador, de las partes y de sus abogados, considerando a dicho aspecto como un elemento clave. Se refiere a la preparación de la mediación concreta, pudiéndose mejorar por un completo estudio previo por parte del mediador de todos los datos aportados en el proceso. En la encuesta, las partes que participaron por primera vez de una mediación, resaltaron la importancia de que sus propios abogados les expliquen que es una mediación, la función del mediador y los objetivos que se pretenden por medio de la misma. El segundo de los aspectos donde se podría mejorar una mediación, hace referencia a la personalización del proceso de mediación para cada mediación concreta, resaltando que la mediación comienza en la etapa de preparación. Tal proceso de personalización, consistiría en un intercambio de información previo, establecimiento de un numero estimativo de sesiones, así como de la duración de las mismas. De acuerdo al informe elaborado, la mayoría de los usuarios buscan conciliación, no mediación, por lo cual quieren que el mediador se involucre, buscando toda técnica necesaria para facilitar el acuerdo de las partes, considerando muy importante que sugiera un solución a la controversia cuando lo considere necesario. Los otros dos puntos clave, hacen referencia a la necesidad de un asistencia analítica de la controversia por parte del mediador y a la persistencia del mismo. En opinión de las partes encuestadas, las principales actividades que debería realizar un mediador para ser útil a la mediación serían: hacer preguntas duras y directas que provoquen el debate, dar su punto de vista sobre los puntos débiles y fuertes de las posiciones de cada parte en cuando a cuestiones de hecho y de derecho, ofrecer una predicción sobre el resultado probable de la controversia si se litigase, sugerir posibles formas de resolver la controversia, recomendar un acuerdo específico y aplicar presión para que se acepte una propuesta concreta.

 

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