La Corte Suprema del país vecino condenó al ex ministro José Dirceu a 10 años y 10 meses de prisión por su responsabilidad en la compra de votos en el Congreso durante el mandato de Lula Da Silva.

Además, José Genuino y Delubio Soares, ex presidente y ex tesorero del Partido de los Trabajadores –respectivamente-, fueron sentenciados por participar en el esquema delictivo y tendrán que abonar multas superiores a los 150 mil dólares.

De esta manera empieza a concluir el llamado juicio del siglo por corrupción en Brasil, en el cual se comprobó la conformación del llamado núcleo político de la sofisticada red que desvió dineros públicos para comprar votos de legisladores a cambio de apoyo a las iniciativas del gobierno.

Dirceu, abogado brasileño de 66 años y ex jefe de gabinete, fue presentado por los jueces del Supremo Tribunal Federal (SFT) como el principal responsable del accionar delictivo.

“Él se valió de sus posiciones de mando y prominencia, tanto en el Partido de los Trabajadores como en el gobierno federal para incurrir en delitos de corrupción”, sostuvieron los magistrados.