Nicholson y Cano Abogados asesoró legalmente en el Fideicomiso Financiero Secubono 198, que fue el primero en ser autorizado por la Comisión Nacional de Valores (CNV) en forma remota, dadas las restricciones dispuestas por el Gobierno Nacional en virtud del aislamiento social preventivo y obligatorio. Asimismo, bajo la misma modalidad, intervino en las autorizaciones de los Fideicomisos Financieros Megabono 223, Megabono Crédito 222 y Credipaz 19.

Desde un primer momento, Nicholson y Cano adecuó sus estructuras para seguir brindando a sus clientes los servicios en forma remota, manteniendo la interacción con la CNV para resolver las cuestiones operativas y legales que se presentaron y así lograr que no se interrumpa el financiamiento de las empresas, en este caso a través de emisiones de fideicomisos financieros.

Esta nueva modalidad de trabajo se realizó de acuerdo a las necesidades de los clientes, como a los requerimientos de la CNV y los mercados. El trabajo coordinado entre todas las partes permitió y sigue permitiendo llevar a cabo las operaciones en un contexto extraordinario.

Hubo un gran trabajo en conjunto de todas las partes intervinientes, quienes desde el inicio del aislamiento social preventivo y obligatorio trabajaron en forma virtual:  Banco de Valores S.A. (en su rol de fiduciario de los mencionados fideicomisos), CNV, mercados, y el equipo de Nicholson y Cano, liderado por Mario Kenny (socio) y Juan Martín Ferreiro (asociado senior).